Cdad. Bs As., Buenos Aires, Argentina
Paciente estudiante o inquieto, músico en progreso o en decadencia, escritor amateur o poco profesional, mujeres en receso o en recreo

02 octubre 2007

La multitud

En las alturas de la senda
y sobre los pastos altos, levitando,
cuando te posas en la ventana de un baño,
en el campanario de la iglesia,
en el descanso de escalera,
entre las líneas de la calle,
cuando el semáforo está en rojo,
estas separado de la tumultosa muchedumbre.

En el invierno resquebrajante
o sobre la superficie arenosa del sol,
en los conductos callejosos
o en la madrugada de la gran avenida,
en los árboles del parque cerrado
o en tu cabeza mirando al cielo estrellado,
es la soledad escapista de tu propio cuerpo .

Sustentos de cristal,
capitales del azar,
animales ciegos y sin tacto,
lentos ropajes de asalto.
Letrinas y estantes,
calibres temblorosos,
modos simples de pensar
en la cantidad desmesurada
de humanindad derrumbada.

Pasos que se duplican
y felicitan a sus perseguidores,
temores y soles abrazados
con órbitas descalzas
y solapas en sus arduos brazos.

Ligeros sabores, libros,
salón de miles de escaleras,
peldaños antiguos,
ruidos de quiebres
de cadenas imaginarias,
nada de temer a la maquinaria,
a la que mueve tu asma,
tu alma y tu silabeo.

Tumultos, demasiadas huellas
que seguir y entender.
Insultos a la intimidad y
dibujos borrosos y milagros,
sales de azucar
y sales sin pensar,
solo corres y pierdes
contra la inmensa masa,
la manza que no se mueve
pero te sumerge y adhiere
como si estuvieras de acuerdo
a ser un tumor del tumulto.

1 comentario:

Gustavo Tisera dijo...

Buenísimo tu blog! Voy a pasar seguido a leerte. Un saludo!